A partir de hoy tendremos una nueva sección donde presentamos a algunos proveedores, porque además de elegirlos para integrar Mil Vidas, creemos que tienen que conocerlos, nuestra primer invitada es Gilda, que nos cuenta un poquito sobre su emprendimiento: Ferita
-Ferita es un mundo de personajes con mucha personalidad y detalle. Todos los muñecos se arman uno por uno, a mano, con cuidado y mucha paciencia en nuestra casa-taller que está en San José del Rincón, un pueblo costero cerca de Santa Fe, rodeados de monte autóctono y muchísimos arboles. El diseño es propio original nuestro y surge un poco del juego y la imaginación dentro del mar de telas que da vueltas por este lugar. Es que la mayor parte de las telas que componen los muñecos son reutilizadas. Sí, además de tiernos estos muñecos se arman dándole una segunda oportunidad y nueva vida a telas que nos llegan y atesoramos con mucha dedicación y cuidado.
Desde el primer esbozo hasta la última puntada, todo se hace con mucha paciencia, disfrutando de cada paso que lleva tiempo, dedicación y por supuesto mucha alegría. Amamos lo que hacemos y eso es parte de la magia que va con cada uno de estos muñecos.
- Mi nombre es Gilda, y soy la persona detrás de estos muñecos.
Antes de convertirme en costurera y bordadora felíz, tenía un trabajo formal (de esos a los que se va en subte y te tienen todos los día coqueteando con el estrés y la alta velocidad del microcentro porteño). Un día a fines del 2012 renuncié a todo y me mudé. Aunque extraño a veces algunas cositas, soy muy feliz en mi nueva vida, no solo por que me divierte muchísimo mi trabajo, sino por que creo que encontré mi lugar en el mundo y eso es una aventura que vale la pena vivir, aunque fuera de todo pronóstico la vida en el campo alejada de las ciudades es mucho más laboriosa y dificil de lo que parece cuando uno vive allá.
Antes de convertirme en costurera y bordadora felíz, tenía un trabajo formal (de esos a los que se va en subte y te tienen todos los día coqueteando con el estrés y la alta velocidad del microcentro porteño). Un día a fines del 2012 renuncié a todo y me mudé. Aunque extraño a veces algunas cositas, soy muy feliz en mi nueva vida, no solo por que me divierte muchísimo mi trabajo, sino por que creo que encontré mi lugar en el mundo y eso es una aventura que vale la pena vivir, aunque fuera de todo pronóstico la vida en el campo alejada de las ciudades es mucho más laboriosa y dificil de lo que parece cuando uno vive allá.
-Último lugar favorito que descubriste:
Antes de cambiar de vida tuve la suerte de poder viajar mucho y si bien conocí lugares fascinantes, el último nuevo favorito por suerte queda muy cerca de acá. Se trata de un bañado con un monte de espinillos casi impenetrable donde todas las tardes vuelven las bandadas de patos a descansar y es una escena abrumadamente hermosa.
-Última ganga que te compraste:
TELAS!! Parte de mis nuevos vicios es hacerme mi propia ropa. Recorriendo pequeños almacenes de la zona encontré unas piezas de telas antiguas que no solo eran hermosas, también fueron una ganga! Ahora solo me queda encontrar tiempo para coser, por que es cierto eso de “en casa de herrero, cuchillo de palo”
-¿Qué artistas en tu playlist?
Esta es difícil. Es un cliché gigante decir que escucho muchísima música y muy variada, pero es verdad! últimamente escucho mucho a Raúl Barbosa, Tonolec y al gran Ramón Ayala, creo es parte de mi enamoramiento con el litoral. Pero tengo días de Björk, Bowie o Stravinsky. La música es muy hermosa como para no tentarse y navegarla toda!
-Nos recomendás una serie?
“Alfred Hitchcock Presents” un clásico de los ’50 y ’60 inagotable y fabuloso, conducido por el propio Hitchcock!!
-Libro que hay en tu mesa de luz:
Por suerte en esta casa hay muchos libros y yo que siempre tuve el vicio de leer varios a la vez y salteados, acá hay libros hasta en la cocina! Los que andan dando vueltas en este tiempo son “Las mil y una noches” (para mi es el padre de todos los libros) , “Cuentos completos” de J.J. Saer (un escritor santafesino que relata como nadie la esencia de la zona en la que vivo) y “La vida de las abejas” de M. Maeterlinck ( me encanta por la poesía hermosa que tiene para explicar algo tan simple y hermoso como la vida de una colmena)
-Tu mantra es:
Omh Namá Shivaya que para mi es una puerta a la serenidad de saber que lo que tenga que ser será y lo que sea que suceda estará bien.